El Detective Sombra Cap 3

Hola Carlos, pasa por mí iremos a casa de la mama de Sandy ¿Dónde estás? Te veo frente al restaurante del Perro Negro –Una pizzería cerca del parque México--. No podemos quedarnos a comer compañero? Otro día Carlos.

Hey JL—la mesera del restaurante salió con una pizza para llevar en la mano—te la envía la señora. Muchas gracias no era necesario, por favor dile que lamento no poder pasar a saludar.

--se escuchó el claxon—vamos compañero!!

Compañero, ¿es buena idea ir de nuevo con la mamá? Sí, tengo un mal presentimiento. Si quieres come una rebanada de pizza mientras llegamos. Dios bendiga el día que salvaste al hijo de esa señora, calla y mira por donde conduces.

--Pasado media hora—

Compañero la puerta está abierta, demonios! Déjame aquí y revisa el perímetro después de 15 segundos pon la sirena.

--JL desenfundo su arma y camino de forma sigilosa colocándose a un costado de la entrada principal, intento ver lo más que pudo con la puerta entre abierta y de forma muy lenta fue abriendo la puerta tratando de hacer el menor ruido posible, poniendo por delante su pistola apuntando, dio dos pasos al frente inclino unos 25 grados la posición de su mira mirando de forma ágil de un lado y de los otro tanto la sala como el comedor se veían vacíos sin embargo logro ver que una las sillas estaba tirada y el mantel un poco corrido, --entonces comenzó a sonar la sirena-- decidió avanzar lentamente por el comedor cubriéndose con el mismo para poder tener una vista hacia la cocina alcanzando a ver un par de pies, JL avanzo un poco más y ahí encontró a la madre de Sandy, tumbada justo en el suelo de su cocina. JL se acercó lo más rápido posible sin dejar de apuntar cuidadosamente reviso la cocina y con una mano reviso el pulso de su madre, pero el cuerpo ya se encontraba sin vida.

JL abrió una grieta y la atravesó, miro el cuerpo de la mujer que había sido apuñalada y guardo su arma. Salió de la cocina vio el comedor que sin duda parece que hubo forcejeo sin embargo la entrada no estaba forzada, vio un mueble con una biblia y JL entre dientes dijo –malditos hipócritas—avanzo al piso de arriba al no encontrarla subiendo las escaleras había dos cuartos a los costados y uno al final del pasillo, pero el cuarto su derecha estaba abierto y claramente se veía una luz prendida, al entrar a la habitación y ahí vio a la mujer con esa mirada fría y llena de odio. --JL la tomo del hombro y la volteo para preguntarle de frente— ¿qué diablos haces aquí? Ella quito la mirada y le pregunto ¿Dónde estamos? Todo se ve normal pero hay un silencio que me perturba y vi mi cuerpo muerto en la cocina. –JL ligeramente sonrió y le dijo—claro, estas muerta –la tomo de la barbilla y le levantó la mirada—véame a los ojos porque diablos vienes al cuarto de la hija a la que mataste --ella sonrió al ver el rostro de JL—porque tenía razón nuestro padre, la vida solo es el camino a la vida después de la muerte. ¿Quién es tu padre? --Pregunto muy molesto JL—jajajaja…. Ella solo reía después de todo podre ver a mi hija de nuevo, ¿Dónde estará esa malcriada? ¡Espera un momento! ¿Entonces también te mataron a ti? --JL, le contesto-- así fue por eso necesito saber ¿quién nos mató? y a ¿quién le dices padre?, porque tus padres murieron ya hace mucho tiempo.

--entonces empujo a JL y le dijo—me largo tengo que ir a encontrar a mi hija asi podre decirle que tenía razón y que solo la envié a lo que será nuestra nueva vida, sin dolor, ni necesidades, ahora podremos vivir tranquilas las dos.

--JL la tomo del brazo con una mano, con la otra tomo su cuchillo colocándole justo frente a su garganta—lo siento pero le prometí a su hija que no se le acercara nuevamente, si no me dirás nada, lo lamento pero terminare con esto.

--hahaha—ya no puedes matarme, ya estoy muerta, --JL presiono el cuchillo en su garganta de la señora y le dijo—Si, es correcto ya estas muerta pero algo te está atando a este lugar y como dije no dejare que te acerques a esa niña. Lo siento pero este lugar frío, solitario y silencioso, únicamente es para los que aún queda rastro de lo que fueron en vida, pero para ti no hay lugar en ninguna parte, --apretó la empuñadura de su cuchillo—y le corto la garganta– mientras la señora sonreía y con sus últimas palabras dijo, el nombre de Jehová mientras se iba disolviendo como polvo en la nada.

--Eres tan desesperado—te he dicho muchas veces que debes ser paciente y más inteligente al sacar información. ¿Solo un nombre? ¿Enserio? Recuerda que sin claridad no hay voz de sabiduría –justo en la entrada del cuarto se encontraba una mujer de cabello muy largo castaño obscuro con un rostro fuerte pero con rasgos finos y muy alta para el estándar de mujer para lo que contesto JL –lo sé pero me daba nauseas el solo tener que seguir hablando con ella--. Pero seguro encontraste algo verdad fénix sino no estarías aquí. –deja de decirme así JL— hable con Sandy, me dijo que el tío en su casa hacia sesiones con todos sus amigos y si mama, probablemente puedas encontrar algo en su casa –Gracias Juana tengo que regresar porque pronto entrara Carlos—Iré a cuidar a la niña hasta que regreses, JL—Gracias Juana.

--JL creo otra grieta y la atravesó—

--JL bajo y se coloco por el comedor para luego marcar a Carlos-- Compañero el perímetro esta limpio, ¿encontraste algo? Si Carlos, encontré el cuerpo de la madre de Sandy muerto en la cocina la posible arma homicida, la dejaron a un costado, ven por mi hablare por lo pronto a los peritos, voy para allá compañero. --JL marco a los peritos pidió refuerzos y en ese momento entraron dos personas que traían mascaras blancas a la casa--

--tan pronto vieron a JL comenzaron a dispararle—

JL se hundió como si entrara debajo de la tierra, pero fue un portal que hizo para poder escapar de las balas.

Los hombres desconcertados se acercaron pero vieron el suelo vacío y a su alrededor del comedor tampoco veían nada, en eso un portal pequeño a un costado del enmascarado se abrió sin que lo notaran y salió la boquilla del arma de JL que sin pensarlo dos veces le disparo, el hombre que recibió la bala, cayó muerto al instante y el otro hombre comenzó a disparar a la nada pues ya no había rastro de quien disparo.

Justo después de eso JL salió detrás del maleante, lo desarmo golpeo su rodilla y le aplico una llave a su brazo, dislocando el mismo. --¿Quién los envio? Pregunto JL—el hombre inclinó la cabeza y con su otro brazo se cortó a sí mismo el cuello.

--Demonios, estas bien compañero—dijo Carlos al entrar con el arma desenfundada.

Si Carlos estoy bien, le dispare a uno y el otro se suicidó cuando ya lo tenía, definitivamente esto es más grande de lo que creemos.

--Carlos examino la escena reviso a los hombres caídos y se acercó a JL, eres un maldito loco no sé cómo lo logras pero siempre sales ileso— JL mostro una sonrisa fingida, pues por su mente solo pasaba que no podía atravesar al otro lado y hablar con los que intentaron matarlo, --Carlos preocupado le pregunto a JL ¿estás bien compañero? Sí, todo bien Carlos, creo que ahora debemos ir con el hermano. Está bien pero primero termines este reporte y luego iremos a donde quieras ya deben estar cerca los refuerzos.

--JL cerró sus puños con fuerza mientras trataba de controlar su rabia al no poder ir y hablar con esos malditos muertos—

En eso se escucharon, las sirenas de los refuerzos.